A más retrasos en los exámenes más suspensos

A más retrasos en los exámenes más suspensos


Los aspirantes a conductores de la provincia de Málaga han de esperar por término medio 45 días para poder presentarse a la prueba de circulación, a consecuencia de la escasez de examinadores. Hay miles de alumnos en esta situación.

Y las autoescuelas temen que a la vuelta del verano (cuando tomarán sus vacaciones los examinadores) y dadas las dos semanas de parón que hay en agosto (coincidiendo con la Feria de Málaga), el tiempo de espera pueda alcanzar incluso los dos meses y medio.

En declaraciones a un medio local, el presidente de la Asociación Provincial de Autoescuelas, Antonio Martín, advirtió recientemente de que «los retrasos en el examen práctico tienen un efecto perverso: el aumento del número de suspensos, ya que los alumnos interrumpen su preparación durante semanas y la reanudan pocos días antes de la prueba, lo cual es perjudicial para ellos.

»La tasa de suspensos en Málaga [en la prueba de circulación] suele estar en torno al 50%, pero en el presente ejercicio hemos alcanzado ya una cota de entre el 70% y el 75%. Esto ahonda el problema, ya que los suspendidos engrosan las listas de espera.

»Y en los centros de Formación Vial pasa lo mismo: los profesores unas veces están parados y otras no dan abasto».

 

Pocas clases

Martín cree que todo se junta, pues también hay algunas autoescuelas que no están actuando de forma correcta, ya que prometen a sus alumnos que obtendrán el carné de forma rápida y los presentan al examen con muy pocas clases prácticas por todo bagaje. «Los llevan a la prueba con una preparación deficiente, lo que constituye un engaño. Un aspirante a conductor debe dar alrededor de 30 clases prácticas, pero algunos van al examen con tan sólo 10 o 15, con lo cual suspenden, como es lógico».

 

Sin horas extras

Antes de empezar la crisis había en Málaga 39 examinadores de Tráfico; ahora hay 24 debido a diversas circunstancias, principalmente, las jubilaciones. A este descenso de personal se une el hecho de que la ratio diaria de pruebas del permiso B por examinador ha bajado en la última década de 16 a 12.


«La Dirección General de Tráfico (DGT) habilitó hace unos meses horas extras voluntarias para los examinadores, con el objetivo de disolver el tapón de alumnos pendientes de examen –explica Martín. La medida, ciertamente, ayudó a paliar durante algún tiempo el problema, pues los funcionarios trabajaban por las tardes, y calculamos que se hicieron 2.000 pruebas adicionales en Málaga gracias a esta fórmula, pero los fondos se han acabado, y no hay horas extra desde el 15 de junio».

 

Refuerzos 

Para Antonio Martín, la solución a este problema pasa por cubrir las plazas de examinadores que están vacantes. «Harían falta 15 examinadores más, pero es sumamente difícil, por no decir imposible, que la DGT rehaga la plantilla que había antes de la crisis. Lo que sí le pedimos es que mande a Málaga algunos examinadores en comisión de servicio o como itinerantes, durante los meses de verano. Quizá en otras provincias no sean tan necesarios como aquí».

(Foto de archivo: Antonio Martín.)