Casi 4.000 millones de estímulo a la automoción

Casi 4.000 millones de estímulo a la automoción
 

El “Plan de impulso a la cadena de valor de la industria de la automoción, que presentó ayer el presidente del Gobierno de España, cuenta con un presupuesto de 3.750 millones de euros. El dinero se empleará en 21 medidas de tipo económico, fiscal, normativo, logístico, competitivo, formativo, de cualificación profesional, de compra pública sostenible y de planificación estratégica.

 

Las medidas a corto plazo (o de impacto), por un importe de 1.535 millones, se implementarán y ejecutarán en lo que resta de año. Las medidas a medio plazo (o estratégicas), por un importe de 2.215 millones de euros, serán puestas en marcha a partir de 2021 y financiadas con cargo a los fondos europeos para la recuperación.
 
Las 21 medidas se articulan alrededor de cinco pilares básicos:
 

  1. Renovación del parque de vehículos para conseguir otro más moderno y eficiente (550 millones de euros).

  2. Inversiones y reformas normativas para impulsar la competitividad y la sostenibilidad (2.690 millones de euros).

  3. Investigación, desarrollo e innovación para los nuevos retos (415 millones de euros).

  4. Fiscalidad para impulsar la competitividad del sector.

  5. Formación y cualificación profesional (95 millones de euros).

 
Dentro de la renovación del parque de vehículos destacan los 100 millones para el impulso de la movilidad eléctrica y sostenible, y los 250 millones para la sustitución de vehículos viejos por otros más limpios y seguros, que incluye como condición el achatarramiento de uno viejo por cada nuevo adquirido.
 
También reviste interés la eventual actualización de las etiquetas medioambientales de los vehículos. El sistema de etiquetado vigente hoy (etiquetas CERO, ECO, C, B) ha permitido una clasificación cada vez más conocida del parque de vehículos, y aporta coherencia a las políticas de ámbito estatal, autonómico y local, en función del potencial contaminador de los vehículos.
 
Sin embargo, la evolución tecnológica es una realidad y los nuevos vehículos incorporan unas innovaciones que los hacen acreedores a ser catalogados dentro de las posibilidades que ofrece el sistema de etiquetas actual, o bien añadiendo nuevas etiquetas.
 
La DGT formará un grupo de trabajo interministerial que estudiará a lo largo de los próximos 6 meses la mencionada actualización del etiquetado medioambiental y elevará una propuesta al respecto.
 
 
En cuanto a la fiscalidad que soportan los vehículos, se analizará a medio plazo una reforma integral de la misma en coordinación con las Administraciones Territoriales. En particular se trata de conferir al impuesto de circulación (IVTM) y al impuesto de matriculación (IEDMT) una mayor orientación ambiental.