En Castellón se están examinando alumnos que tenían que haberlo hecho el 26 de julio

En Castellón se están examinando alumnos que tenían que haberlo hecho el 26 de julio

Una lista de espera de 3.000 aspirantes a conductores colapsa las pruebas de circulación en la provincia.

 
Muchos de ellos, citados hace dos o tres meses y que no pudieron examinarse, rehúsan volver a la autoescuela porque no tienen dinero para más prácticas.
 
La de Castellón era una de las jefaturas donde la escasez de examinadores se había vuelto crónica antes de la huelga. De hecho, la víspera de que estallase el conflicto, la DGT envió tres examinadores itinerantes a la provincia, pero sólo se ha quedado uno de ellos.

A la escasez de examinadores hay que añadir que autoescuelas de localidades tarraconenses limítrofes acuden a Castellón para que sus alumnos pasen la prueba de circulación.
 

Lo explica el presidente de la Asociación Provincial de Autoescuelas, Antonio Pertegaz: «Actualmente tenemos ocho examinadores, pero dos están de baja. Tres hacen huelga y, de los otros tres, hay uno que la secunda un día sí y otro no. Si prosigue esta situación en noviembre y diciembre, y teniendo en cuenta que a algunos de los examinadores les quedan vacaciones por tomar, es posible que los alumnos presentados el próximo mes se examinen en febrero. Es un auténtico desastre».

 
Además, hay jóvenes que han ido al examen práctico dos o tres veces y se han tenido que volver sin haber hecho la prueba, mientras otros han logrado examinarse a la primera. «Es una de las fuentes de malestar en el sector, porque se están produciendo agravios comparativos», dice Pertegaz, quien añade: «La semana que viene tengo una reunión con el jefe provincial [Víctor Sales] y, si no me da solución a este asunto y no pide a Madrid más examinadores itinerantes, nos volveremos a manifestar.  
 

La sequía que sigue a la tromba de agua

No acaban aquí las desdichas. Castellón, como otras muchas jefaturas del país, ejemplifica la observación de que tan malo es que llueva a mares como que no caiga gota. Las bolsas de aspirantes formadas por la huelga están dando paso al retraimiento de las personas que quieren obtener el permiso, hasta el punto de que la matriculación de alumnos ha descendido un 40%. «Vienen a la autoescuela y preguntan si se ha solucionado el problema de los examinadores o si continúa la huelga. Y, claro, cuando les informas de que todo sigue igual, dan media vuelta y se marchan», concluye Pertegaz.  

(Foto: Antonio Pertegaz.)