Juan Ignacio Zoido promete el regreso al consenso en Seguridad Vial

El ministro de Interior compareció hoy ante la Comisión de Seguridad Vial y Movilidad Sostenible para detallar una serie de medidas tendentes a reducir los accidentes de tráfico graves.

Casi todas estas medidas eran ya conocidas; algunas de ellas están ya en marcha. Costarán 11,7 millones de euros. Citaremos las más importantes:
 
– Un refuerzo de la seguridad en las zonas de adelantamiento que afectará a 1.000 kilómetros de carreteras de doble sentido con un carril por cada uno, mediante la reubicación de las señales verticales, la utilización de una línea continua doble y la implantación de balizas.  
 
– El refuerzo de la señalización en los cruces peligrosos.
 
– Los avisadores de velocidad, mediante paneles fijos y variables, en 250 puntos de vías convencionales. Tendrán lectores de matrículas. No servirán para sancionar; su finalidad será advertir.
 
– Un nuevo y exhaustivo estudio de los puntos negros, con aplicación de la metodología internacional más avanzada. Se trata de evaluar la seguridad de nuestras carreteras.
 
– Una nueva instrucción de vigilancia para la Guardia Civil, que determine en qué horarios y lugares hay que reforzar el servicio.
 
– La optimización de los radares, dando prioridad a los tramos INVIVE (Intensificación de la vigilancia de la velocidad), y una evaluación periódica de su eficacia.
 
– La ubicación de numerosos paneles que recomienden el uso del cinturón.
 
– Sesenta nuevos puntos fijos de control de velocidad y del uso del cinturón, que se señalizán previamente.
 
– El refuerzo de la señalización en tramos INVIVE. Ahora hay 300; se van a señalizar 1.200 más. Esta medida realzará el carácter intensivo de los controles móviles.
 
– Un guía de buenas prácticas en travesías y vías urbanas, que se pondrá a disposición de las administraciones locales y comunitarias.
 
– La señalización de nuevas rutas ciclistas seguras.  
 
– La introducción de guías sonoras longitudinales en el eje central de la calzada, a fin de evitar la invasión del sentido contrario y una eventual colisión frontal.
 
– Una campaña de vídeo en redes sociales y medios digitales sobre el peligro de las distracciones al volante debidas, sobre todo, al uso del teléfono móvil.
 
– Otra campaña en redes sociales y medios digitales con el testimonio real de las víctimas. "Hay que ponerle rostro y voz a las víctimas".

Además.
 
El ministro anunció también:

– La elaboración de un plan estatal de educación vial que prime la transversalidad y el aprendizaje a lo largo de toda la vida. Se trabajará con grupos de edad y con grupos específicos. 

– Un plan estatal sobre la bicicleta. 
 
– La revisión profunda de la estrategia de seguridad vial, pues "hay que averiguar qué es operativo y qué no".
 
– Posibles reformas de la Ley de Seguridad Vial y de los Reglamentos conexos. El ministro pidió ayuda a todos los grupos parlamentarios y subrayó la necesidad del consenso "para que los cambios sean profundos y duraderos".
 
– La reactivación del Consejo Superior de Tráfico. De hecho, anunció una reunión del mismo la semana que viene para estudiar el plan sobre la bicicleta.
 
– Un pacto de Estado que estimule la coordinación interministerial (y que involucre a Sanidad, Fomento, Empleo, Educación e Industria), la colaboración de las Comunidades Autónomas y de los Municipios (de hecho se ha creado ya una comisión bilateral con la Federación de Municipios y Provincias), la de los fabricantes de vehículos, la de las autoescuelas y asociaciones moteras, la de las Asociaciones de Víctimas, etc. "Vamos a estudiar todas las propuestas que nos haga la sociedad civil". 
 
Juan Ignacio Zoido finalizó con las siguientes palabras: Hay muchas decisiones que tomar. Lo mejor es que lo hagamos entre todos y tras un profundo debate". 

Permiso por puntos y examinadores

La oposición se felicitó del nueva voluntad de consenso y de la vuelta a la seguridad vial como política de Estado. El portavoz socialista, Pablo Bellido, urgió al ministro a que "solucione el problema de la falta de examinadores" y le pidió que "desbloquee la situación actual del permiso por puntos".

También le instó a corregir "la espectacular desinversión en materia de mantenimiento de las carreteras". Bellido dijo que la "eliminación de la asignatura de Educación para la Ciudadanía, había suprimido los contenidos de educación vial en los colegios e institutos. Así mismo, criticó la disminución del auxilio en carretera, y terminó con estas palabras: "Nos gusta la música de sus planes, aunque habrá que leer la letra pequeña".

Casi todos los portavoces de los grupos parlamentarios insistieron en la necesidad de dotar a la DGT de más examinadores de Tráfico. Zoido dijo, en el turno de réplica: Faltan 176 examinadores. Sólo hay 12 provincias que superan los 20 días de espera para la prueba de circulación. Se han autorizado horas extras y hay 15 examinadores itinerantes. Hay que hacer atractivo el trabajo de examinador. Les pido un poco de paciencia".