La Comisión Europea, lista para reformar la directiva del permiso de conducir

El Ejecutivo europeo acaba de publicar su evaluación de la normativa vigente. El informe es favorable, pero en él se constata la necesidad de un mayor esfuerzo, si se quiere reducir la accidentalidad grave y las muertes en las vías abiertas al tráfico. 

La conclusión del documento es que la directiva actual ha tenido en general un efecto beneficioso, aunque insuficiente, en la seguridad vial y ha favorecido la libre circulación de los ciudadanos de la UE; también ha logrado reducir el fraude en los permisos de conducción y la carga administrativa que comportan. 

Una de las principales virtudes de la Directiva 126/2006 es que ha logrado una cierta armonización de las legislaciones nacionales dentro de la Europa de los 27, pero aún «subsisten algunas diferencias». La Comisión pretende avanzar hacia una mayor homogeneidad en lo que se refiere a los siguientes puntos:

1) La formación, las prácticas y las pruebas para obtener los permisos. Con respecto a esta cuestión, la Comisión observa que «Los requisitos de formación varían considerablemente entre los Estados miembros, mientras que las normas sobre habilidades y conocimientos de los conductores están establecidas por la directiva». 

Los redactores del documento anotan que las opiniones difieren con respecto a la necesidad de armonizar las obligaciones de formación. Algunos afirman que la ausencia de un marco homogéneo tiene una repercusión negativa en las habilidades de los conductores y en la seguridad vial, mientras que otros señalan la necesidad de permitir flexibilidad a los Estados miembros y respetar las peculiaridades nacionales a la hora de definir los planes de estudios. 

Al mismo tiempo, expertos consultados por Bruselas destacan la importancia de potenciar la conciencia del riesgo y el autoconocimiento entre los aspirantes al permiso y los conductores noveles, en pro de la seguridad vial.  La Federación Europea de Autoescuelas (EFA), que preside Enrique Lorca, así como las Confederaciones Nacionales de diversos países, comenzando por CNAE, trabajan en esa línea recomendada por los científicos. 

2) Las condiciones para la renovación de los permisos de conducción, cuando expira su validez administrativa.

3) Los reconocimientos médicos y su periodicidad, cuando se trata de los conductores no profesionales (categorías A y B).

4) Los requisitos para los examinadores de conductores y el reconocimiento de los permisos de conducción expedidos por terceros países.

Por último, y al objeto de acabar por completo con los fraudes y reducir al mínimo la carga administrativa, la idea es impulsar el permiso de conducir digital.