Innovar y unificar la formación para crear una verdadera conciencia de seguridad vial

La Asociación Europea de Autoescuelas (EFA), que preside el español Enrique Lorca, aboga por un modelo de acceso gradual al permiso de conducir, a través de un sistema de formación y examen común a todos los miembros de Unión Europea (UE). 

Con motivo de la revisión de la directiva del permiso de conducir, actualmente en trámite, EFA ha lanzado un documento estratégico en el que fija su postura sobre el procedimiento de habilitación de los conductores y renovación de los permisos.  

Para las autoescuelas del Viejo Continente el objetivo último de la formación vial debe ser la creación de una verdadera conciencia de la seguridad vial entre los usuarios de las vías abiertas al tráfico. De ahí que EFA haya elaborado una matriz que recoge los principales aspectos a tener en cuenta. 

El acceso por etapas al permiso de conducir es uno de ellos. Se comienza por un permiso provisional, que establece una serie de restricciones, por ejemplo: no autoriza a conducir de noche, ni por autopistas, ni con una tasa de alcohol superior a 0, ni sin supervisión (al menos inicialmente) y se acaba por el permiso definitivo. El paso por la autoescuela y la superación de exámenes teóricos y prácticos son imprescindibles. 

La innovación en los contenidos de la enseñanza, es otro. Concretamente, se trata de que los aspirantes a conductores también reciban formación sobre: Primeros Auxilios, Sistemas Avanzados de Ayudas a la Conducción (ADAS), Eco-Conducción o Conducción Eficiente y Percepción del Riesgo.

Clases presenciales

Es importante la formación teórica presencial, pues favorece la interacción entre profesores y alumnos, y por tanto estimula la concienciación, lo que no excluye el empleo opcional, para la explicación de algunos temas, de herramientas tecnológicas, como la realidad virtual o los simuladores. 

EFA pone el énfasis en la necesidad de un buen examen, con altos estándares de calidad y pruebas justas y transparentes, supervisadas y calificadas por examinadores escrupulosamente imparciales. 

Tanto desde el punto de vista de la enseñanza, como de los exámenes, EFA sostiene que es imprescindible que los profesores y los examinadores reciban una formación armonizada en todos los países de la UE, que comprenda la actualización de conocimientos. Incluso es conveniente que los profesores y los examinadores compartan una parte de la formación, en el marco de un sistema modular parecido al que se aplica en las universidades. 

Permisos para vehículos de dos ruedas

El acceso escalonado a la conducción de motocicletas (de menor a mayor potencia) está regulado en la Europa de los 27, pero hay matices. Algunos países exigen un examen para obtener el permiso A. Otros, entre ellos España, permiten el paso del A2 al A, tras haber cursado el aspirante una formación que la autoescuela certifica. Este segundo modelo pudiera favorecer, según los expertos, la percepción del riesgo y, en todo caso, ahorra una cantidad de pruebas de circulación, lo que resulta interesante dada la escasez de examinadores en algunos países.

EFA es también partidaria de crear un permiso o licencia para E-scooters (scooters eléctricos), que deberían sacarse quienes ni siquiera tienen el permiso de ciclomotor (AM). 

Atraer a los jóvenes hacia la conducción profesional

La escasez de conductores profesionales es un problema acuciante en la UE. Faltan unos 400.000 conductores de vehículos pesados para el transporte de mercancías y unos 17.000 de autobuses y autocares. Por si fuera poco, la edad media de quienes se ponen al volante en el transporte por carretera rebasa los 50 años. EFA propone un sistema de formación que atraiga a los jóvenes. 

Habida cuenta del continuo crecimiento del comercio electrónico, EFA considera imprescindibles los cursos de formación para conductores de furgonetas y taxis y propugna una versión suave del Certificado de Competencia Profesional (CPC) para conductores de vehículos de entre 2,5 t y 3.5 t., furgonetas y taxis. 

En definitiva, EFA recomienda una formación inicial y una actualización de conocimientos para los conductores que transporten mercancías o pasajeros de un modo profesional, además de un mayor alineamiento de la directiva del permiso de conducir con la del certificado de competencia profesional.

Reciclaje

La actualización de los conocimientos y habilidades de los conductores debe correr en paralelo con la modernización tecnológica de los vehículos y las novedades normativas. En Europa, el 80% de quienes se ponen al volante obtuvieron el permiso hace 20 años o más. Particularmente, el vertiginoso desarrollo de los Sistemas Avanzados de Ayuda a la Conducción (ADAS) hace posible una mayor seguridad de los vehículos, a condición de que los conductores se familiaricen con sus funciones y características. EFA aconseja una formación obligatoria añadida para quienes usen vehículos a partir del nivel de automatización 2.